Quizás no esté convencido de recibir la vacuna contra el COVID-19. Es natural estar inseguro de algo tan nuevo.
Pero usted quiere volver a la vida que tenía antes de la pandemia.
Entonces, ¿cuál es el verdadero problema con los reclamos que escuchó? Siga leyendo mientras separamos la realidad de la ficción.
La vacuna contra el COVID-19 es segura.
Realidad. Las reglas de seguridad de la vacuna de EE. UU. se basan en pruebas y estándares de seguridad exhaustivos, lo mismo que para otras vacunas. La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. examinó los ensayos clínicos, cada uno de los cuales evaluó a cientos de miles de personas antes de garantizar las dos vacunas hasta el momento: Moderna y Pfizer/BioNTech SE.
En EE. UU. nadie murió por ponerse la vacuna, según se puede ver en el Sistema de Información de Reacciones Adversas a las Vacunas en https://vaers.hhs.gov. De hecho, las muertes posteriores a la vacunación fueron extraordinariamente raras y solo sucedieron en el extranjero. Es posible que esas muertes hayan ocurrido por una vacuna que no está disponible en Estados Unidos.
Podría tener una reacción alérgica mortal.
Ficción. Las reacciones alérgicas graves, incluyendo la presión baja, como en la anafilaxia, son poco probables con las vacunas contra el COVID-19 al igual que después de ponerse cualquier otra vacuna. La falta de aire, las urticarias y otras reacciones también son poco frecuentes.
Por las dudas, los hospitales y los enfermeros que vacunan tienen epinefrina o EpiPens en el lugar para tratar cualquier reacción a la hipersensibilidad. Es por eso también que el personal médico lo deja en observación durante 15 minutos después de la vacunación. Si es propenso a reacciones alérgicas de las vacunas, hable con su proveedor de atención médica con antelación.
No se ponga la segunda dosis si tuvo alguna reacción alérgica a la primera.
Las vacunas no pueden causarle COVID-19.
Realidad. No hay un virus vivo en las vacunas disponibles en Estados Unidos. En su lugar, se basan en un nuevo método, en el que los mensajeros moleculares envían la codificación genética del COVID-19 directamente a nuestras células para que reconozcan y destruyan el virus en caso de que intente invadir. Estos mensajeros se llaman mRNA, la abreviatura de vacunas de ARN mensajero. Las vacunas contra el COVID-19 de Pfizer/BioNTech y de Moderna son vacunas mRNA.
Las vacunas enseñan a nuestro sistema inmunitario a reconocer y combatir el virus en caso de contagio. Y son impresionantes guerreras: Los estudios mostraron que previenen hasta el 95% de los casos. Incluso si se infecta después de vacunarse, experimentará síntomas leves o ningún síntoma. Sin la vacuna, podría estar en riesgo de tener complicaciones, discapacidades a largo plazo o incluso morir.
Debería tomarse un día libre en el trabajo después de vacunarse.
Ficción. La mayoría de las personas están bien al día siguiente. Algunas tienen dolor en el área de la vacuna, se sienten cansadas o tienen fiebre leve o dolor de cabeza. Es posible que se sienta como si tuviera gripe, lo que en realidad es una buena señal. Los síntomas significan que la vacuna está enseñándole al cuerpo a pelear con el virus. Los efectos secundarios son más frecuentes después de la segunda dosis y deberían desaparecer en pocos días como máximo. Hable con su médico o enfermero si está preocupado.
Si está embarazada o amamantando, debe consultar con su obstetra/ginecólogo antes de vacunarse.
Realidad. No se evaluaron ampliamente en los ensayos clínicos a las mujeres embarazadas y las madres primerizas. Pero el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (American College of Obstetricians and Gynecologists, ACOG) dice que no deberían ser excluidas de la vacuna. Hable con su médico primero. Él puede garantizarle que la vacuna no dañará su fertilidad.
Las vacunas contra el COVID-19 no están disponibles para niños.
Realidad. El objetivo de desarrollar vacunas seguras y efectivas lleva a las empresas a enfocarse en los adultos. La vacuna de Pfizer/BioNTech está aprobada para personas mayores de 16 años y la de Moderna, para personas mayores de 18 años. Los estudios clínicos en jóvenes están en investigación, y es posible que se apruebe una vacuna para niños a fin de año.
Usted puede ayudar a los investigadores.
Realidad. Descargue la aplicación V-safe en su teléfono. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos desarrollaron un sistema de control posvacuna para ayudar a los profesionales médicos a garantizar que las vacunas sigan siendo seguras. Para obtener más información, visite CDC.gov.
La información de este artículo corresponde al 26 de febrero de 2021.